Cuando el mes de septiembre del año 2002 se estaba instalando en su ecuador, en Águilas -su pueblo y el de un grupo de once personas, unidas, entre otros motivos, por la querencia y el respeto hacía Paco Rabal– nació esta hermosa aventura.
La idea había surgido durante y tras los actos conmemorativos del primer aniversario de la muerte del entrañable e internacional actor aguileño. Y decidieron que no podía dejarse exclusivamente en manos de la Administración el deber de recordar y homenajear permanentemente a una de esas pocas personas a las que, en relación directa con su trayectoria, todo lo que se le honre nunca será suficiente. Aquella aspiración fue, y es, sumar voluntades.
Y al nacer, el único objetivo fue ir dándole forma a una entidad que velara por mantener vivo el recuerdo de su personalidad, humana y artística. Y ambicionaron convertirse en un caudal que dinamice cualquier proyecto, propio o de quienes quisieran, también, pescar en las mismas aguas.
Poco tiempo hubieron de emplear en ponerse de acuerdo respecto de las intenciones de cada cual. Todo estuvo claro desde el primer día y comenzaron a trabajar sobre los aspectos que conforman los flecos en la creación de este tipo de entidades, sobre todo si sus objetivos son culturales y sin ánimo de lucro.
En el Acta Fundacional, tras la aprobación de los estatutos, elaborados al amparo de la Ley Orgánica 1/2002, de 22 de marzo, figura el acuerdo de adoptar el nombre de Asociación Cultural MILANA BONITA. Paco Rabal en el recuerdo. Y su primera junta directiva, formada por los once socios fundadores, se presentó públicamente el 28 de diciembre, el día de los Santos Inocentes, del año 2002. La alusión estaba clara.
Aquel día, en el salón de los espejos del Casino de Águilas, con doscientas personas que lo llenaban, presentamos nuestro proyecto y las intenciones que nos habían llevado hasta su consecución. Tras la proyección de un montaje realizado por Juan Oliver, miembro de esta Asociación, sobre escenas importantes y momentos emotivos de la vida y obra cinematográfica de Paco Rabal, los apoyos, ánimos y presentaciones fueron generalizados. Más de lo que a posteriori hemos percibido, pero no ha sido, ni es, motivo de contrariedad; todo lo contrario.
Aunque posteriormente -en algunos casos por motivos personales, pero sobre todo por y para hacerla más operativa- las sucesivas formaciones de juntas directivas han ido conformándose con menos personas, algunas de ellas a modo de nuevas incorporaciones, patente ha de quedar el tributo y reconocimiento a todas ellas.
Aquellas once personas, arropadas por el numeroso público presente, y con el padrinaje que supuso el aval de la presencia de Jordi Rebellón que, de alguna manera, representó el calor y el cariño del mundo de la interpretación uniéndose a aquellas once correas de transmisión que lograron arrancar el motor de aquel esperanzador proyecto y… de esta hermosa realidad.
SOCIOS FUNDADORES
- Miguel Ángel Blaya Mengual
- Francisco Escámez Reverte
- Andrés Escarbajal de Haro
- José Hurtado Martínez
- Raimundo Jiménez Ramírez
- Francisco José Montalbán Rodríguez
- Salvador Montalbán Rodríguez
- Juan Oliver García
- Ginés Ortiz Díaz
- Alonso Paredes Morata
- Ramón Román Díaz
Directiva 2019-2022
- Miguel Ángel Blaya Mengual
- Francisco Escámez Reverte
- Lucía Ana Hernández Hernández
- Raimundo Jiménez Ramírez
- Juan D. Oliver García
- Alonso Paredes Morata
- Antonio Soler Navarro
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